El día de hoy no ha sido fácil escribirles, no por falta de temas o inspiración, sino más bien por exceso de ambos factores; los temas danzan en mi mente como bailarinas, las frases llegan con cada objeto que observo, cada aroma que percibo, cada tono que escucho y cualquier elemento que siento, cada persona es una nueva historia, cada situación me permite reinventarla, siento vivir en un mundo de novelas, relatos, fantasías, cuentos, leyendas, fábulas.... aterrizo en mi mundo, en esta ciudad, que prefiero denominar pueblo, lleno de realidades, problemas, noticias, verdades, aquí me encuentro, rogando por estar en mi mundo, dentro de mis historias fantasiosas, queriendo inventarle colores al amor, recreando mi mundo mágico, agregándole placeres, detalles, formas, matices con paciencia, calma, pausa, es en el único lugar donde puedo permitirme no ser lo que soy para inventar una nueva yo.
Pero el tema de hoy no es mi mundo, ni mis fantasías, ni mis momentáneos letargos que tanto disfruto, por el contrario, es algo completamente ajeno a eso, es realidad pura, simple como todo en la vida, sencillo como dicen soy y real como lo que suelo escribir. Mi historia se remonta a unos años atrás, cuando las cosas no eran tan confusas, cuando un día libre no implica más trabajo, cuando respirar era mecánico, encontrar la belleza en un paisaje no era complicado y convertir una situación en diversión era parte de mi vida.
Todo comienza donde empieza todo en mi vida, donde puedo encontrar todas mis experiencias y desempolvar cada uno de mis recuerdos, mi colegio, espacio que me acompañó por 14 años a correr, a triunfar, aprender, creer, soñar, imaginar, en resumen a crecer; es allí donde me acostumbré a ser lo que soy, donde viví cada una de mis experiencias, sin cambio que me afectara, sin adaptaciones que afrontar, sin límites desconocidos, sin barreras no esperadas, sin restricciones, sin extrañeza, sin miedos; en mi ambiente, en mi espacio, con licencia para ser Mariabetania, donde no debía buscar aceptación, ya era aceptada, donde no debía cambiar mi forma de ser para brillar, ya brillaba a más no poder; formaba parte de ese ente, me sentía compenetrada, identificada, lo sentía mío... y aún lo siento así, en parte me pertenece.
Con seguridad ya tienen una idea de lo que será mi tema de hoy, adaptación, recurro al Internet, que todo lo sabe, para intentar definirla, "proceso en el cual un individuo ajusta su comportamiento a las expectativas del medio social en que se mueve", bastante preciso, totalmente cierto y completamente práctico; definirlo ayuda a comprenderlo pero no a afrontarlo, no creo poder ajustar mi comportamiento escribiendo acerca de ello, pero se hace fácil vivir con el si lo expreso en letras, como siempre he hecho cuando mi vida me oprime.
Como cualquier humano evolucionado regular, sufro cambios, razones para ello, las he buscado sin éxito alguno, y aún así los acepto y me ajusto a ellos (calificación de adaptación en ese aspecto: 20ptos!), mis amigos cambian, no puedo evitarlo, me relaciono con humanos evolucionados para mi desgracia, las distancias se hacen más grandes, las visitas más esperadas, las salidas menos regulares, los cuentos menos detallados, compartimos cada vez menos cosas, siento necesario alejarlos de mi vida para crecer y ajustrarme a mis propios cambios, recordarlos, extrañarlos, saber que están allí pero no puedo estar junto a ellos, me duele, molesta y no logro reconciliarme con ese aspecto (calificación: 0 ptos!); cambios escolares que nunca viví, crear nuevas amistades, confiar en nuevas personas, inventar un nuevo ambiente, olvidar el pasado y vivir el futuro, modificarme a esta nueva vida, socializar, vivir, ser humana, conversar, caer bien, no es algo que prefiera, requiera y me satisfaga hacer por los momentos (calificación: 0 ptos!)... promedio: 6,66666... REPROBADA
Conclusiones
1. La economía se me da mejor que la adaptación....
2. La adaptación es un proceso y como todo proceso lleva tiempo.
3. Soy dura al calificarme, siempre, busco la perfección y creo que en esta asignatura en particular no hay escalas.
4. Ajustarme a los cambios, en este momento en el que vivo y viviré por largo tiempo se hace necesario ¿qué será de mi si no logro aprobar esa asignatura? ¿Existirá algún tipo de recuperativo? El tiempo lo dirá, por ahora seguiré en la lucha.
2 comentarios:
Jajajajajj 6,66666, espero haya un recuperativo para ti, aunque creo que aún puedes salvar la materia. Te quedan unos cuantos trimestres.
Como dice una frase algo trillada, no hay que oponerse al cambio, por el contrario, hay que adaptarse a las nuevos escenarios que la vida nos brinda y pintarlos de colores y matices que nos alegren los días. Vale la pena luchar por un nuevo día. Así que no te apures, poco a poco ese 6,66 aumentará, no sé ni cómo ni cuándo, pero sé que aumentará
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